Y… ¡Acción! (III): Grabando ‘la nana de lilith’

¡Por fin nos metemos de lleno en el rodaje de un corto!

Después de daros la chapa con toda la teoría de producción y dirección cinematográfica, hoy os voy a contar a titulo personal cómo se vive el hecho de que un escrito tuyo, un guion de apenas páginas, cobre vida en una pequeña o gran pantalla, y lo gratificante que es el trabajo, no importa lo duro que pueda resultar.

Tanto ‘La nana de Lilith’ como ‘Musa’, de la cual hablaremos la semana que viene, surgieron de improvisto, un par de semanas antes de empezar a grabar. Todo trabajo de última hora. ¿La razón? ‘Despertar’, el corto que había escrito y preparado para el curso, no era viable en tiempo de pandemia: muchas localizaciones, muchos personajes juntos, muchos cambios de vestuario y maquillaje…. Simplemente no era posible soportar el peso del corto en esos momentos, y se quedo en el cajón de cortos futuros. Sin embargo, yo tenía que llevar a cabo un proyecto propio, como mis compañeros. Tenía que crear una nueva historia.

Marina, mi profesora, fue quien me dio la idea.

Era una idea que habían tenido en la mente durante bastante tiempo, y que habían intentado llevar a cabo a través de otro alumno, pero que nunca había cuajado. Era una historia de terror, un género que yo no había tocado NUNCA, y al que le tengo muchísimo respeto (me encanta Stephen King). Es un género en el que, al igual que el thriller, tienes que tener todos los hilos muy claros para que nada se quede sin cerrar. Mostrar el mal rollo en el espectador para que se adentre en la historia.

Y allá que fui, nerviosa pero decidida.

Decidí cambiarle la edad de los personajes principales, hacerlos más jóvenes para que coincidieran con el perfil de los actores. Jugué con la idea de una cita de estudio, donde un chico intenta conquistar a la chica nueva, pero que tiene intenciones muy oscuras. La idea de una posesión me parecía interesante, pero no quería la típica, sino que el «fantasmas» fuera alguien importante, alguien que tuviera algo que contar.

Alguien que tuviera que tomar la palabra para contar una versión distinta de la historia.

Y parece que funcionó. Gracias a la ayuda de Marina, que me ayudó a corregir y pulir la trama y las acciones de los personajes, conseguimos sacar a tiempo el guion para que los actores lo estudiaran a fondo. Todo comenzó a fluir, el corto ya se estaba convirtiendo en realidad.

‘La nana de Lilith’ se grabó en un fin de semana. Dos días, ocho horas por día más o menos (más más que menos) y decenas de planos que grabar, aparte de la necesidad de redecorar la escuela como si fuese una casa abandonada (el trabajo fue intenso, pero valió la pena.

Y sobre todo, fue una tarea ardua para mí. Tener que compaginar la labor de Dirección con Dirección de Fotografía es compleja, pues tienes que estar pendiente de qué los actores lo interpreten correctamente y no tenga ninguna duda a la par que tienes que constatar que los planos son buenos y no están desenfocados. En este aspecto, creo que lo podría haber hecho mejor, pero nadie nace sabiendo.

Estoy orgullosa de la labor de todo el equipo al completo: los actores son buenísimos y muy fáciles de hacerles entender qué es lo que quieres, el equipo técnico nos complementamos a la perfección y el resultado es increíble. Con sus fallos de novatos, pero increíble.

Y aquí tenéis el tráiler del corto. Espero que os guste y lo podáis disfrutar pronto.

Trailer ‘La Nana de Lillith’

¡Hasta la semana que viene!